El gobierno de los Estados Unidos ha anunciado que, a partir del 11 de mayo de 2023, la vacuna contra el Covid-19 ya no será obligatoria para ingresar al país. Esta medida ha sido recibida con diversas opiniones y reacciones en todo el mundo.
La obligatoriedad de la vacuna había sido establecida desde 2021 como una medida para controlar la propagación del virus y proteger la salud pública. Sin embargo, con la disminución de los casos y el aumento de la vacunación en el país, el gobierno estadounidense ha decidido hacer un cambio en las normas de ingreso.
A partir de esta fecha, los viajeros que ingresen al país norteamericano podrán hacerlo sin la necesidad de presentar una prueba de vacunación contra el Covid-19. Sin embargo, se ha aclarado que seguirán siendo obligatorias otras medidas de prevención, como el uso de mascarillas y la realización de pruebas de Covid-19 antes y después del viaje. Además, ese mismo día, tendrá fin la emergencia sanitaria decretada en 2020 contra la pandemia del coronavirus.
Esta medida ha generado diversas opiniones y reacciones. Algunos grupos han celebrado la decisión del gobierno, argumentando que la vacuna no debería ser obligatoria y que la decisión de vacunarse debería ser personal y voluntaria.
Otros han expresado preocupación por la posible propagación del virus en el país, y han instado a las personas a seguir tomando medidas de prevención.
El gobierno ha señalado que esta medida será evaluada constantemente y que, si es necesario, se podrían implementar cambios en el futuro.